Rincón del Este y Circuito Damiana Vega (Merlo, San Luis)

Hace casi un par de años que voy de vacaciones a Merlo.
Siempre me hablaron del circuito de Damiana Vega, nunca
la habia hecho. Es más, no tenia idea del lugar exacto
donde empezaba, sabía que quedaba cerca de la ruta que
va al Filo pero de todas las veces que pasé en años
anteriores nunca ví el desvio jeje (hay un cartel antes,
pero sin ninguna flecha ni nada). Esta vez fue diferente,
ubicamos el camino por mapa antes de viajar a Merlo y
una tarde (al día siguiente de haber ido a La Paz)
emprendimos la subida hasta el arroyo El Molino con el fin
de merendar algo. Luego seguimos subiendo hasta la
entrada del circuito (que está ni bien se pasa la entrada de
la reserva florofaunística). Era una tarde tremenda, creo
que pocas veces en mi vida he visto un atardecer tan
espectacular, por que justo el día anterior habia
llovido(toda la mañana de ese dia estuvo nublado) y las
(oscuras) nubes empezaban a disiparse sobre las sierras
que junto a la luz del sol mostraban un paisaje
formidable, de esos para hacer una captura de pantalla
mental y guardarlo para siempre jeje. Nos quedamos
contemplando esa belleza, documentamos el hecho (que
grande el trípode!) y emprendimos el recorrido del
circuito. En un momento, a pocos metros de empezar,
habia otro desvio. Nos metimos a ver que onda pero luego
de bajar entre piedras nos llevó a un claro donde aterrizan
los parapentes. Las huellas indicaban el paso de cuatris
(debo reconocer que detesto los cuatris, je), asi que
anduvimos bastante por este sendero. Tan entretenido
que cuando nos dimos cuenta, la tarde estaba
terminando. Fue ahi cuando optamos por volver a buscar
el verdadero circuito, esta vez con bastante apuro
(demasiado confiado, no llevé la linterna para la bici) por
que se venia la noche. Finalmente lo encontramos, la
bajada es espectacular (con la luz del día jaja), eso si
guarda que hay muchas piedras (grandes) sueltas y en
algunos tramos se va bastante rápido. En eso nos agarró
la noche (jeje), asi que ese fue otro momento
"adrenalístico" de la semana, bajando solo con luz trasera
y preguntándonos cuándo faltaba para el cruce con el
asfalto que conduce a Merlo (es el mismo que va al
Monasterio de Belén y Carpinteria). Ya en terreno familiar,
pedaleamos más confiados de vuelta a nuestra "base de
operaciones", llegamos ok y con la idea de jamás olvidar
llevar la linterna de Currahee(que usamos luego para ir a
comprar la cena).