Bajando a San Francisco - SL 3

31-10-2016

De la Carolina a San Francisco.

Saliendo desde la Carolina hay un poco de ascenso hasta llevar a una planicie de altura llamada "pampa de las invernadas" se trata de una estepa a unos 1.700 m.s.n.m. Continuando hay algo más de ascenso hasta llegar a casi la cumbre del cerro El Amago. A partir de aquí hay un descenso vertiginoso con curvas cerradísimas para bajar casi 1.000
metros hasta San Francisco del Monte de Oro.

Nunca tardé tanto en hacer un descenso tan corto en kilómetros. No sólo por las precauciones que hay que tomar sino también porque el paisaje es tan alucinante que paré varias veces a sentarme y contemplarlo y a las aves rapaces que sobrevolaban muy cerca mío: jotes cabeza colorada, cabeza negra, aguilas moras, cóndores y muchas más que no supe identificar. No quería bajar más de ahí.

Luego de terminar el descenso, unos kilómetros más y me desvío unos 8 kilómetros por el camino conocido como "rodeo de cadenas" que empieza en el santuario de la virgen de lourdes. Es alucinante descensos, ascensos, badenes y todo enmarcado entre las sierras e inmerso en el monte nativo donde destacan las palmeras caranday. La idea era unirlo con otro camino que va al paraje "El Rincón" en un circuito de unos 35 km que había planeado en casa pero al haber olvidado el mapa y ante la duda decidí volver sobre mis pasos al llegar al río Socoscora.

La última parte hasta el pueblo la hice por detrás del dique "Las Palmeras" por un camino asfaltado señalizado como "ruta del perilago". Es mucho más lindo: pasa más cerca de las sierras y con trepadas, no muy exigentes, que dan una excelente perspectiva del embalse desde la altura.

01-11-2016

Otro día de fuerte viento, esta vez del sur ahora que yo volvía hacia esa dirección. De todas maneras fue una buena oportunidad para quedarme un día más en San Francisco y hacer una salida corta, livianito, sin alforjas, avanzada la tarde y calmado un poco el ventarrón. Unos 40 km yendo a la Quebrada de López, río Gómez y otros
caminos de la zona. Muchísimo monte nativo. Todo alambrado, sujeto al criterio del dueño del campo. Espero que perdure en el tiempo. Los alrededores del pueblo son increíbles para los que nos gusta la naturaleza.