Número: 120600
Carta abierta a corredores de DH y publico en general

Bueno amigos, después de haber estado este fin de semana en Carlos Paz observando la carrera de DH del Open Shimano, me veo en la obligación moral de expresar mi humilde opinión. Me presento, mi nombre es Federico, soy de Córdoba y un apasionado por las bicis.
Aquí comienza todo: después de haber visto en la Web un par de videos de descenso y sin mas conocimiento que eso, me decidí a comprar un bici para empezar a practicar esta disciplina del MTB que tanto me gusta (verlo al menos) y que dista bastante de mi habitual Cross Country . Esto me llevo un par de meses de búsqueda de una bici que cumpliera con los requisitos que tenía en mente, a saber: BUENA, BONITA Y BARATA. La cosa es que cuando encontraba una bonita, no era barata y cuando era barata, no era ni buena ni bonita
y así se pueden imaginar todas las combinaciones posibles. Todo esto hasta el día en el que halle la pareja que estaba buscando, una preciosura llamada ZK1 de apellido VAIRO, muy linda y a un precio que podía pagar; sin perder más tiempo, y con el tercer round del Open en mente como día de debut, me hice con ella después de un breve trámite de intercambio de algunos pesos.
Luego de la adquisición y tras unos retoques estéticos y funcionales indispensables (como ponerle frenos), comencé a preparar todo lo que necesitaba para desempeñarme en esta actividad. Eso fue lo mas sencillo diría, comprar algunos elementos de protección, como ser casco, rodilleras y guantes, y pedir prestado a algunos amigos que corren el Quads el resto de las cosas que necesitaba.
Ahora bien, siendo el día 23 de mayo, y con todo listo y en orden, partimos con un amigo hacia la ciudad de Villa Carlos Paz, previo una escala en Córdoba para cambiar de móvil, dicho esto aprovecho para agradecer a los responsables de mi translado y fans numero uno y dos respectivamente: Lucas y Gabriel Gracias Amigos- ( al margen, uno de ellos llevaba una remera con mi cara impresa y una bincha de Damián Córdoba
jeje), pero basta de sentimentalismos y vamos a lo que nos compete.
Ya en la base del circuito el dia de entrenamiento, vestido para la ocasión y con todas las ganas de subir para después bajar como un bolido (algo osado mi pensamiento) y luego de una rápida pero eficaz puesta a punto de las suspensiones a cargo del Ingeniero Pencil (solo eso se de él, je) me subo al camión que luego me depositaria en la cima de la montaña por la que debía descender. Algunos compañeros de camión me tiraron algunos ticks a cerca de lo que debía y no debía hacer arriba de la bici mientras bajara, no se sus nombres pero gracias a todos ellos, sus consejos fueron de gran utilidad sobre todo uno que recuerdo muy bien y que no hice demasiado caso: no te tires jeje, debí escucharlo.
Una vez en la cima deje que salieran los demás pilotos primero, ya que como era mi primer bajada sabia que seria muy lento y no quería interferir en el entrenamiento de ellos
17, 18, 19
y seguía yo. Empecé muy despacio y cauteloso con ambos dedos índices sobre las palancas de freno, pensando en que lo que estaba transitando no me representaba mayor dificultad, a medida que avanzaba, el terreno comenzó a ponerse mas y mas agreste con saltos y cortadas que hubiera jurado que nadie podía pasar por ahí sobre un bicicleta. Hasta que sucedió lo impensado, mientras esquivaba uno de estos saltos por el opcional, me freno a admirar la dificultad del mismo y como salidos de la nada aparecen dos pilotos que saltaron y pasaron como un rayo (y sobre sus bicis eh
), ahí fue cuando empecé a pensar ¿en qué me había metido? Una vez repuesto del golpe anímico que esto me había generado, me subo nuevamente a la bici y continúo con el descenso, mientras en mí cabeza solo rondaba una frase estos tipos están locos, algo herrado por cierto, ya que de la competencia también participaban Tipas, alcancé a ver en los entrenamientos a una que montaba una nave diría yo, una Specialized Demo 9 creo, ambas muy lindas (bici y piloto) y además poseedora de una técnica de manejo envidiable.
Transcurría el descenso mientras solo pensaba en cuanto me quedaría para llegar al final del trazado, a cobijo de suelo firme y plano, cuando me encuentro con otro de esos saltos asesinos en el que tuve que frenar y bajar a pie, donde además fui testigo del golpe que se pego un compañero, el pequeño gran Francisco, quien nos hizo pasar un buen susto a todos los que ahí estábamos observando. Desde ese punto y con la firme convicción de que no correría al día siguiente me dirigí a la base del circuito a pie y con la bici al lado, cuidando la integridad física de ambos. Espero que esto sea solo la primera impresión y cuando lo intente en otro circuito -la próxima me busco uno más fácil- logre disfrutarlo, como veo que lo hacen todos ustedes corredores de DH, sino ya verán publicada la bici en BTT
jeje, una joya, se los aseguro.
Creo que me extendí un poquito, ya para ir cerrando me gustaría expresarle a todos estos pilotos/as mi mas sincero sentimiento de admiración, -Namaste- ;y a quienes suelen asistir de espectadores a este tipo de competencias, les comento que desde abajo se ve un poco mas sencillo de lo que en realidad es.
Esperando perderle el miedo, me despido de ustedes.-
Federico.