FUERON MÁS DE MIL
Mis piernas están doloridas, los muslos agrietados, el cuello rígido. Fueron veinte días de pedalear por llanuras, con viento en contra, montañas, camino de ripio, distancias grandes para mi. Ayer cuando estaba a punto de encarar el tramo más duro (La Cumbre), lloré ante lo poco que me faltaba y lo mucho que significaría realizar esa parte final del esfuerzo físico, mental y espiritual que me esperaba. Antes de comenzar, decidí parar a comer en una casa de comidas "El refugio del Duende", allí comí las pastas caseras de la Sra. Cristina y eso me entregó fuerzas para comenzar la trepada. El camino no tiene reparos, no le importa si uno está cansado, no te pregunta si tu cuerpo está dolorido. Ahí, en esos momentos claves, es cuando hay que sacar a relucir la fuerza pura del alma, el grito de la poesía que te impulsa a seguir avanzando como sea. Apenas faltaba el empujón final para llegar pero el cuerpo estaba con muchos dolores, el espíritu intacto, la garra de la sangre poeta no tuvo dudas, siguió subiendo la cuesta durante un tiempo que nunca terminaba. Era impiadoso, subía a paso de hombre, cada pedaleada costaba hasta llegar el momento del "quiebre" donde uno ya deja de sufrir y se entra en otro estado. El cuerpo avanza impulsado por una fuerza desconocida, algo que nace como un fuego que destruye todos los impedimentos y hace que tu humanidad siga pedaleando, con una carga de cuarenta kilos en las alforjas, con el cuerpo trajinado por los kilómetros recorridos, el alma se instala en tus piernas para pedalear con uno hasta llegar al final de la Travesía Ciclopoeta.
Opinion de FUERON MÁS DE MIL
11-03-2013 13:43
Muy buen relato! esperamos mas fotos y de talles del viaje
Saludos
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a: cordobes85
Gracias cordobes85, si, ya se vendrán todos los relatos, fotos y videos. Va un gran abrazo
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Increíble final amigo, Felicitaciones. Por cierto, el momento del quiebre (llamado "saltar la muralla" por los runners) es increíblemente mágico, como para degustarlo mil y una veces. Saludos.
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Muchas gracias estimado Slazer, a seguir saltando murallas, ese quiebre es maravilloso. Abrazos desde el Uritorco.
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Gracias Vidabreve!! Costó pero llego a puro piñon. Un abrazo desde el Uritorco. Ya subiré fotos apenas me encuentre tranquilo en casa. Abrazos.
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¿ Ya eras ciclista avezado o de macho nomás te largaste a este viaje ? Un capo !!
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No, fue la primera vez, entrené un par de meses y me largué a los caminos. Nada que ver con el ciclismo, pero ahora me siento muy pleno con la travesía. Abrazos estimado alendroval.
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